Hoy, 27 de Mayo de 2015 es el Día Mundial de la Esclerosis Múltiple, día en el que se reúne a la comunidad internacional de Esclerosis Múltiple con el fin de compartir experiencias, concienciar y hacer campaña con y para todos aquellos afectados por la esta enfermedad. (1)
La Esclerosis Múltiple (EM) es uno de los trastornos neurológicos más comunes, así como una de las causas más frecuentes de discapacidad en adultos jóvenes. A la mayoría de los afectados por la EM se les diagnostica entre los 25 y los 31 años de edad, siendo el número de mujeres afectadas el doble que el de hombres. Existen 2,3 millones de personas con EM en todo el mundo (2), aunque es muy probable que algunos cientos de miles más sigan sin diagnosticar.
En esta enfermedad se ve afectada la mielina o materia blanca del cerebro y de la médula espinal, provocando la aparición de placas que impiden el funcionamiento normal de esas fibras nerviosas. (3)
La mielina es una sustacia grasa que rodea y aísla los nervios, actuando como la cobertura de un cable eléctrico y permitiendo que los nervios transmitan sus impulsos rápidamente. La velocidad y eficiencia con que se conducen estos impulsos permiten realizar movimientos suaves, rápidos y coordinados con poco esfuerzo consciente.
La EM produce una anomalía inmunológica que se suele manifestar en problemas de coordinación y equilibrio, debilidad muscular, alteraciones de la vista, dificultades para pensar y memorizar y sensaciones de picazón, pinchazos o entumecimiento, además de otros síntomas. Las causas que originan la esclerosis múltiple se desconocen, si bien hay indicios de que podría tratarse de una enfermedad inmune que hace que el organismo ataque su propia mielina. Hasta la fecha no tiene cura, pero una serie de fármacos y recomendaciones ayudan a que su avance sea más lento.
Hay una enzima concreta, la PDE7, que es la que dificulta la diferenciación y la proliferación de las células encargadas de reparar la mielina en pacientes de EM. Investigadores del grupo de Neurobiotecnología Molecular y Celular del IBEC descubrieron un par de nuevos inhibidores de esta enzima que al aplicarlos reducían la mortalidad de las células reparadoras de mielina. Este descubrimiento puede llevar a comprender mejor la mielinización y a ayudar a desarrollar estrategias terapéuticas de remielinización para el tratamiento de la esclerosis múltiple. (4)
La gravedad del desarrollo de la EM, así como los síntomas, puede variar de manera muy amplia entre personas. Entre ellos, se incluye la visión borrosa, debilidad en las extremidades, sensación de hormigueo, inestabilidad y fatiga.
Para algunas personas, la EM se caracteriza por periodos de remisión y recaída lo que significa que mejora durante un tiempo pero luego puede atacar cada cierto tiempo. Mientras que para otros tiene un patrón progresivo, es decir que el paciente empeora de manera constante a lo largo del tiempo. Algunas personas pueden sentirse sanas durante muchos años tras el diagnóstico, mientras que otros pueden verse seriamente debilitados con gran rapidez.
Autora: Carolina Llorente